miércoles, 26 de diciembre de 2012

Carpe Diem???

Quien lo entienda que me lo explique, me hallo, un 26 de Diciembre a las 23,20 de la noche sin otra perspectiva que huesos, ligamentos y músculos carpianos. Los días precedentes no se han quedado cortos entre ciclos, elementos, rayos, galenos, hipócrates , dorso, tórax.... y, hablo en general para no empezar a soltar una lista de nombres de cuya existencia ni el más curtido catedrático de la lengua española puede saber, entre otras cosas, porque no ha estudiado la carrera donde la polisemia se lleva a la práctica en cada encrucijada de la anatomía, donde los nombres propios y arbitrarios son la norma y a la lógica le queda poco terreno.

Y en noches como esta, sabiendo que hay vida fuera de la habitación en la que vivo, lloro, suspiro y por poco como hace una semana, con el moreno flexo en estado avanzado y, sobre todo con el whatsapp lleno de vida social y mi familia rutera en Madrid tomando un merecido descanso tras un largo trimestre; me da por pensar en la fuerza que me ata a esta silla(literalmente), a estos libros, a esta ilusión....

Pero, tengo un problema, hoy no la encuentro, no veo la luz al final del túnel, 6 años parece demasiado tiempo, ni que decir tiene 6 navidades, veranos, tardes, noches, 6 años de vida a los que le sumamos otro de sinvivir y otros tantos de "sindormir" con guardias en hospitales, nochebuenas, nocheviejas, cumpleaños, veranos....

Esta noche todo está demasiado empinado...Cualquiera puede llegar y decirme que ya sabia donde me había metido, que puedo con eso y más; pero nadie va a entenderlo porque nadie más que mis compañeros y yo estamos aquí, a las 23,20 un 26 de diciembre planeando pasar una noche frente al escritorio a la que le sigue más de un mes en la biblioteca, entre libros, apuntes, huesos, cadáveres....

Tal vez no lo sabía, ni lo sé ahora, si no abandono es porque son una fan extrema de los retos y me niego a sucumbir a las adversidades, pero desde aquí firmo y manifiesto que no lo hago de buena gana, que la anatomía no compensa las navidades perdidas y que los frutos de mi trabajo son a tan largo plazo que creo que para cuando los recoja tendré arrugas, y eso, con 18 años recién cumplidos es difícil de aceptar....



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